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OPINION - Page 2

  • La gran lección de Israel ante el terrorismo

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    Los gobernantes de Israel entendieron a la perfección que la única manera de responder a quienes claman por su destrucción y predican el exterminio de los judíos, era derrotándolos. Intentaron negociar con gobiernos y organizaciones como Egipto, Al Fatah, Jordania, etc., logrando la paz después de vencerlos en el campo de batalla. A la vez que, a aquellos que insisten en su propósito de "borrarlos del mapa" les da su merecido.

    Es una máxima de la guerra: si no derrotas al adversario, este te derrota a tí.

    ¿Por qué en Colombia, persisten unas anacrónicas guerrillas y organizaciones mafiosas que le hacen la guerra al estado y violentan a la población civil destruyendo los recursos con sus acciones criminales y de terror?

    Cuando por una vez entendimos que era legítimo derrotarlos por la vía de las armas se logró un resultado positivo y contundente para la nación.

    Desafortunadamente, a un presidente embelesado por obtener un nobel de paz, le dio por renegar de la guerra legítima llegando a propagar la idea de que "prestar hijos para la guerra" era inmoral, en videos publicitarios de campaña presidencial y propiciando una negociación de paz fraudulenta en la que los jefes guerrilleros fueron premiados mientras juzgan a cientos de generales y altos oficiales. El pacto de La Habana, derrotado en el plebiscito 2016 convirtió en héroes a los villanos y en bandidos a los defensores de la patria.

    Afirman que vivíamos en una guerra, se aceptó que tenía la forma de un conflicto armado interno a través de una ley, pero, en la práctica condenaron a las Fuerzas Armadas al debilitamiento y de hecho a hacer ver que está mal enfrentar a los violentos que quieren destruir nuestra democracia e imponer sistemas totalitarios. En esas estamos.

    Desenmascaramos el diablo, pero…?

    Hemos desenmascarado el diablo, lo hemos descrito en todas las formas posibles, hemos denunciado sus maniobras encubridoras, hemos dado el debate entre el estado austero y el gigantismo de estado, el estado austero, la separación de poderes. Lo hemos caricaturizado, hemos salido a las calles, también hemos develado su falso discurso contra la oligarquía mientras le da la mano a JMSantos, a ESamper y a Mancuso, hemos criticado su amor por la viaticadera, sus desplantes, sus falsas poses de sabio y maestro. Le hemos adornado su hoja de vida con adjetivos entre mordaces y serios: Cantinflas, camorrero, charlatán, mentiroso, provocador, posudo, amenazador, corrupto, despilfarrador, diletante, etc. Pero el diablo es el diablo y sigue adelante echándole fuego a todo lo que según él le estorba o considera inadecuado.

    ¿Qué nos falta por hacer? ¿Sentarnos a ver las llamaradas de la destrucción mientras llega el 2026? ¿Que destruya el Consejo Nacional Electoral, que se apodere de los medios como ya se ve? ¿Mantenernos divididos y lelos ante el desastre?

    Si lo que hemos hecho ha sido insuficiente estamos en el deber de evaluar en qué estamos fallando: ¿Exceso de retórica quejosa e irónica? ¿En que no queremos entender que la división, descoordinación y egoísmo juega en nuestra contra?

    Si no nos organizamos en un solo y sólido Frente Común por la Democracia y la Libertad y diseñamos una táctica de movilización y salimos a dar la batalla de manera unificada, el diablo y sus diablitos se quedarán echando candela a lo que aún funciona.

    Coda 1: Expresémosle al presidente Uribe toda nuestra solidaridad y apoyemos su solicitud para que se le otorgue el tiempo que se requiere para el análisis de la información que contiene el teléfono y el computador de Monsalve, testigo principal en su contra. Garantías procesales es un deber ineludible de la Justicia.

    Coda 2: El próximo presidente de Colombia, sea hombre o mujer debe aprender y poner en práctica esa lección. Se les hace a los grupos armados ilegales una propuesta que o la toman o la dejan.  Si la toman tendrán beneficios jurídicos, deben entregar armas y bienes para resarcir a sus víctimas. Si la rechazan, hacerles llover rayos y centellas hasta derrotarlos. Hay que CAMBIAR la política del arrodillamiento por la de dignidad y firmeza.

    Darío Acevedo Carmona, 5 de octubre de 2024

  • Gobierno de comejenes y termitas

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    Este es un gobierno de comejenes y termitas. Estamos viendo el desplome de Ecopetrol y eso debe tener consecuencias y bien fuertes, fuera Petro, fuera Roa, Fuera Bonilla. Lo que han destrozado no tiene parangón, superaron a los chavistas con PDVSA que se tomaron cerca de 5 años. Es el fruto de la política anticarburantes  y de ecología global de Petro que consiste en "salvar a la humanidad", pero, empobreciendo a los colombianos. Acabó con exportaciones de carbón, no hay gas, acabó el sistema de salud, con su reforma laboral acabará con millones de microempresas. ¿Llegará el día que cocinemos con leña?

    El de Petro es un gobierno desquiciado, tóxico y destructor, por ello debemos salir a las calles para evitar que el desastre de Petro sea total. Este presidente ha utilizado el cargo de presidente para sembrar odio de clases, camorras, decir disparates, viajar con desenfreno, malgastar recursos oficiales, acabar con Ecopetrol, el gas y el carbón, amenazar con un estallido social, ser permisivo con el caos y la violencia de guerrillas y mafias, estimular la corrupción oficial, hacer malos nombramientos, desconocer el Congreso, atacar a la Justicia, atacar a los medios, debilitar a las Fuerzas Armadas y darles órdenes desconcertantes, pagar a delincuentes para que no delincan, estigmatizar a la sociedad, a los empresarios, a los ricos, mancillar los símbolos patrios, perderse en farras, violar la constitución, ofender a la sociedad, victimizarse, en fin escándalo día a día no le falta, y todo ello para enturbiar, entorpecer, desviar y sabotear las investigaciones que sobre sus acciones realizan de manera legal las instancias y entidades encargadas de hacerlo.

    Ya se ve muy desquiciado, y lo más desopilante es ver a toda la izquierda, incluidos unos pocos personajes que se reclaman de izquierda democrática, siguiendo ciegamente a este pastor que mal trata a la gente como descerebrada. Grave peligro de una locura colectiva.

    Petro, en el único rol que le conocemos en tres décadas viviendo del estado y como agitador, le da una ORDEN a nuestras Fuerzas Militares y de Policía de "no levantar sus armas contra el pueblo", pregunto a los generales y altos oficiales activos y retirados(A), ¿acaso algún presidente de nuestra república les dio esa orden en el pasado?

    O ¿Será que Petro se equivocó pues se las debió haber dado al Eln, al Comando 2a Marquetalia, a Iván Mordisco, al Clan del Golfo y demás grupos y milicias que violentan a la población civil?

    ¿Pretende Petro incendiar el país para evitar un proceso legal y legítimo que adelanta en contra de su campaña el Consejo Nacional Electoral y la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes?

    ¿Piensa Petro, aprovechar la reciente y cuestionable directiva de la Fiscalía General de la Nación, poner al servicio de su causa a las Fuerzas Armadas cuya función esencial reza así: "Las Fuerzas Militares tendrán como finalidad primordial la defensa de la soberanía, la independencia, la integridad del territorio nacional y del orden constitucional (Artículo 217)"?

    En ninguna parte, léase bien, en ninguna, las Fuerzas Armadas y de Policía tienen por misión colocarse al servicio de una causa judicial y administrativa de tipo personal de ningún oficial ni de su comandante supremo.

    No pretenda manchar el uniforme de los oficiales de Bolívar con el lodo que cubre muchos de sus actos y mejor dé ejemplo de respeto por la Constitución, no abuse ni distorsione su poder y sus funciones.

    Provocar y amenazar con desórdenes y movilización enardecida no hace parte de las funciones de un presidente de Colombia.

    Adenda 1. Si Petro culpa a la oligarquía colombiana de todas las injusticias y de todo lo malo que sucede en el país, pregunto ¿por qué está aliado con JMSantos, con ESamper, y por qué busca hacer tratos con politiqueros que se venden por un tamal y con elementos de partidos cuyos principios o ideales no se conocen o los profesan como fachada?

    Adenda 2. En la falsa “asamblea del pueblo” el sábado pasado (14 septiembre 2024) en la Universidad Nacional, Gustavo Petro se despojó de su investidura presidencial para vestirse con el ropaje de revolucionario, el que mejor le queda. Petro incitó a esa concentración de activistas e incondicionales seguidores a tomarse los espacios del poder. Estamos pues notificados de la decisión de convertir unas acusaciones en su contra en pretexto para imponer su dictadura bajo el pomposo y falso nombre de “poder del pueblo”. Sabemos que Petro es hábil y astuto, que está dispuesto a provocar una sangrienta revolución con tal de salvarse de la acción de la justicia, sabemos que no tiene reatos morales que no respeta líneas rojas.

    Estamos los colombianos conscientes del grave desafío que nos plantea este personaje? Dejaremos que el país se ahogue en un mar de sangre con el que pretende ante todo zafarse de su obligación de responder por los delitos que se le imputan?

    Qué están pensando las instituciones centrales de Colombia?: la Corte Constitucional, la Corte Suprema, el Congreso, la Procuraduría, las Fuerzas Armadas? Van a agachar la cabeza, a acatar un llamado a la violencia revolucionaria, a la insurrección? Nos vamos a dejar chantajear por las amenazas de un iluminado?

    Darío Acevedo Carmona, 29 de septiembre de 2024

  • Comentarios a un trino en X de la Senadora Pizarro contra la periodista Vicky Dávila

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    ¿Como así Senadora Pizarro, Usted cree que todo en el pasado fueron "décadas de gobiernos corruptos y/o asesinos... (y pregunta) dónde estaban los medios cuando el país se desangraba... "? (véase: X 18 de septiembre de 2024) copiando el estilo de su jefe de condenar a "esta sociedad corrupta" por todo lo sucedido antes de su mesiánica llegada al poder. Quiero recordarle que no todo fue tan obscuro como Usted cree ni atribuible a la sociedad, al estado a los gobernantes y que en el desangre que hubo y sigue anegando nuestro país han sido autores: maleantes, bandidos, paramilitares, mafiosos, bandoleros y guerrilleros. Y que hubo medios que en vez de agachar la cabeza o callar sufrieron ataques ante las denuncias de corrupción y de violencia política.

    Me hago muy extenso, pero es necesario, aquí le ofrezco hechos que deshilachan sus admoniciones indiferenciadas y generalizantes: El Tiempo y El Espectador, entre otros, fueron censurados por la dictadura de Rojas Pinilla, El director de El Espectador fue asesinado por Pablo Escobar, Juan Gómez Martínez sufrió un bombazo en su residencia, decenas de periodistas, de altos funcionarios y dirigentes políticos probos fueron secuestrados o asesinados, valientes periodistas investigadores denunciaron muchos casos de corrupción, noticieros y diarios han conformado unidades investigativas. Gran parte de los casos que se han conocido es gracias a ellos. No es correcto igualar a todos los gobiernos en el mismo sartal de señalamientos ni tiene validez pretender justificar los escándalos de corrupción del gobierno que Usted defiende aludiendo a hechos de corrupción del pasado, ese estilo no resiste enunciación en ningún estrado judicial ni sustento ético.

    Y ante el listado que muestra en su mensaje a la periodista Vicky Dávila, lo copio con mi respectivo comentario en negrilla:

     "- Entre 1991 y 2011 la corrupción le costó 189 billones a la nación, y solo entre 2016 y 2022 le costó otros 137 billones por casos de corrupción." 

    Puede tener razón, pero ¿podría señalar omisión o complicidad de algún medio o periodista en concreto?

    "- Más de 16 mil millones de pesos robados al Estado con Agro Ingreso Seguro bajo el gobierno de Uribe..."

    Le repito la pregunta anterior, además, no puede negar que el exministro Arias, se esté o no de acuerdo con el fallo, está pagando una larga condena, mientras el gobierno petrista hace todo lo posible por tapar el festín que se dan con billones de corrupción, no hay un solo proceso en firme a pesar de las evidencias, y, además, la defensa de Ustedes consiste en escudarse con que antes también hubo corrupción. 

    "- 15 personas del primer círculo de Uribe Vélez condenadas e investigadas por gravísimos delitos." Menos mal lo dice, fueron "condenados" y no puede negar que mucha tinta y verbo ha circulado por los medios y los estrados.  

     "- Billones de pesos que superan los ceros que pueden caber en la cabeza de cualquier persona, con los contratos dados en el entramado de corrupción de Odebrecht durante los gobiernos de Uribe y Santos. Las chuzadas del Das, la Yidis Política, las marionetas, los múltiples carteles, los OCAD Paz, los 12 billones que no aparecen de las regalías."

    Igualmente, habla en general. Los medios periodísticos de radio, prensa y TV investigaron y divulgaron ese "entramado" mundial, entre otros.  

    "- 257 dirigentes políticos, incluidos 58 congresistas, 4 ex presidentes del Congreso y 9 gobernadores CONDENADOS por aliarse con paramilitares y mafiosos... 800 mil personas asesinadas en el marco del conflicto... El exterminio de la Unión Patriótica y el asesinato de 6mil de sus militantes... 6.402 jóvenes ejecutados."

      Hablar al bulto tiene el efecto de señalar un solo culpable y a la vez esconder otros. Los condenados por paramilitarismo fueron enjuiciados y condenados, los del frente civil de las guerrillas siguen mondos y lirondos en el Congreso, en la rama judicial y hasta en el Ejecutivo. Los "800 mil asesinados en el conflicto" los puede ver desagregados en informes del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) en los que se revela la responsabilidad de las guerrillas, de los paramilitares, de grupos mafiosos, de agentes del estado, ¿por qué ese afán de acusar a esta "sociedad corrupta" y negarse a especificar la diversidad de responsables? Sobre el "exterminio de la Unión Patriótica", una tragedia muy dolorosa, los medios han investigado, denunciado y clarificado con gran amplitud. Y sobre la cifra propagandística de "6402" falsos positivos también valdría la pena que consultara informes técnicos muy rigurosos del CNMH, cuya cifra, muy grave nadie lo niega, es muy inferior.

    "- 8 millones de personas desplazadas, 6 millones y medio de hectáreas despojadas. Los problemas del país no comenzaron en 2022. A diferencia de tu memoria selectiva, las fuerzas del cambio somos las primeras en rechazar cualquier hecho de corrupción en este o cualquier gobierno. Tarde o temprano tu candidatura estará acompañada por esa clase política que representa el pasado."

    Cifras y más cifras de muertes y violencia lanzadas al aire sin desmenuzar para alimentar la culpa colectiva y evitar hablar de actores de carne y hueso: jefes de grupos paramilitares, Farc-ep, Eln, Epl, M-19, capos mafiosos, etc, y, de nuevo, sugiero acudir a los informes estadísticos del CNMH y su Observatorio de la Memoria y del Conflicto (OMC).

    Y hablando de corrupción como uno de los más graves delitos en nuestro país, la invito a darle una explicación sincera a la opinión pública y a los millones de víctimas del conflicto armado interno sobre la maniobra que Usted hizo en su paso como contratista del CNMH entre 2013 y 2017 al presentar certificados de estudios universitarios de especialista no creíbles para obtener un incremento en sus honorarios, asunto que denuncie ante la Procuraduría General de la Nación, que, desafortunadamente, prescribió por enredos que derivaron en su archivo por vencimiento de términos.

    Darío Acevedo Carmona, 19 de septiembre de 2024

  • Tres temas:(1) Las cifras de la JEP y las del CNMH sobre falsos positivos. (2) Petro hace trizas el estado y la democracia colombianas. (3) El profesor Petro denuncia amenaza de muerte

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    En el siguiente link del Observatorio de la Memoria y el Conflicto (OMC) del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH)

    https://micrositios.centrodememoriahistorica.gov.co/observatorio/download/estadistica-falsos-positivos/, se puede consultar el informe: Estadística Falsos Positivos, Fecha de Publicación: 13/05/2022. Sistema de Información de Eventos de Violencia del Conflicto Armado (SIEVCAC). (Fecha de corte: 30/04/2022) y constatar que la cifra 6402 es incorrecta, que las cifras que acepta la JEP tal como se desprende de las principales fuentes, carecen de soporte creíble, que esa cifra ha sido inflada con fines políticos propagandísticos.

    “Principales fuentes de falsos positivos 1978-2020, en negrilla el # de víctimas.

    FISCALIA GENERAL DE LA NACION: 841

    DEFENSORIA DEL PUEBLO: 26

    COORDINACION COLOMBIA EUROPA ESTADOS UNIDOS: 33

    CORPORACION REINICIAR: 35

    COMITE PERMANENTE PARA LA DEFENSA DE LOS DERECHOS HUMANOS: 45

    CPDH OFICINA DEL ALTO COMISIONADO PARA LA PAZ: 46

    COMISION INTERCONGREGACIONAL JUSTICIA Y PAZ: 110

    UARIV: 489

    CINEP: 715

    OTRAS FUENTES: 508

    Para los 1.318 casos (No sé si es lo que la JEP llama "universo provisional de hechos”) de falsos positivos hay 155 fuentes y un total de 2.848 documentos.

     

    (2) Petro hace trizas el estado y la democracia colombianas

    Enardecido y desbordado en su palabrería incitadora Petro pretende evadir la justicia y ahuyentar las investigaciones por corrupción y exceso en los topes de campaña amenazando con nuevos estallidos sociales, convocando "asambleas populares" en la principal universidad del país, en las que, según da a entender, se escribirá el "nuevo orden" de Colombia. Sabemos que quiere sembrar miedo, al estilo de sus camaradas dictadores venezolanos, Maduro y Cabello. Sabemos que victimizarse es un ardid, que atribuir lo que le sucede a un plan de una "oligarquía" a la que, en buena parte tiene de su lado, es una cortina de humo para no responder por los delitos en que él, su familia y su entorno han sido involucrados. Y como no parece tener un límite para despistar a la opinión, ahora sale con el cuento, de que lo van a asesinar en un plazo de tres meses, o, lo van a destituir (por el 109) queriendo hacer ver el proceso por violación de topes de campaña como un complot

    Tomémoslo en serio, aunque suene a cañazo, porque es presa del desespero al verse acorralado por sus evidentes acciones contra el orden, la constitución, los medios y los otros dos poderes de la república. Colombia sabe que él puede hacer mucho daño, mucho más del que ya ha hecho.

     

    (3) El profesor Petro denuncia amenaza de muerte

    Dándoselas de filósofo y de profesor, en alocución desde Armenia, el presidente Petro lanza una nueva tesis sobre la "violencia en Colombia", la causa del "genocidio permanente" es "la ausencia de comunicación social... solo ha habido asesinados, 700mil..." Así que los llamados violentólogos de Colombia y del extranjero que han estudiado nuestros problemas, deben callar y postrarse ante su alarde de cientificidad.

    En su alocución, Petro se refiere a una vasta cantidad de complejos temas internacionales y nacionales, sociales, políticos, filosóficos, históricos, etc., que despacha con deshilvanadas y desordenadas afirmaciones carentes de lógica y demostración, frases de autoridad, incontrovertibles. Habla del poder en abstracto, del filósofo alemán, Habermas, de la constitución de 1881(sic), del genocidio por 75 años en Colombia acusando a la oligarquía y por supuesto, sin mencionar a las organizaciones  guerrilleras que auparon el terror, la desgracia y el dolor de millones de personas.

    Su verborrea conduce a decir, sin prueba alguna, solo por su propia deducción, por su propia elucubración, que es víctima de una amenaza de muerte, a señalar que el CNE lo quiere destituir siendo que es un órgano administrativo y que el presidente solo puede serlo por causa penal, y es ahí donde recurre a su fallida destitución cuando era alcalde de Bogotá.

    Pero, su comparación es falsa porque el Consejo Nacional Electoral no es el que lo va a procesar ni a destituir, el CNE es apto y así lo reconoció el Consejo de Estado, para investigar por violación de topes su campaña electoral, y quien lo ha de juzgar por indignidad (violación del art. 109 de la Constitución) es su juez natural y constitucional, el Congreso de la República.

    De citarse a juicio, como insinúan las evidencias, puede salir absuelto o condenado a dejar el cargo sin consecuencias penales.

    La sociedad colombiana está al tanto de los escándalos por corrupción de Petro, para no hablar de otros desastres, y de cómo, haciendo gala de una astucia inagotable distrae a la opinión pública con sus disparatados temas traídos de los cabellos cuyo único fin es el de no dar la cara para responder por la violación de topes en la campaña que lo instaló en el poder.

    Nada que ver con disquisiciones sobre el poder o sobre la guerra civil española o sobre Antonio Nariño ni Santander, nada que ver con Hitler o con Jürgen Habermas ni el calentamiento global ni con los derechos de las mujeres, ni las tendencias sexuales ni con el polvo de las estrellas.

    Petro se escuda en un supuesto golpe de estado u orden de asesinarlo y así desprestigiar la investigación y ya sí la muy posible decisión del CNE de condenar su campaña electoral, y, por ende, de que tal decisión sea compulsada a la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes.

    Darío Acevedo Carmona, septiembre de 2024

  • La falsa asamblea de Petro y el "golpe de estado"

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    En la falsa “asamblea del pueblo” el sábado pasado (14 septiembre 2024) en la Universidad Nacional, Gustavo Petro se despojó de su investidura presidencial para vestirse con el ropaje de revolucionario, el que mejor le queda. Petro incitó a esa concentración de activistas e incondicionales seguidores a tomarse los espacios del poder.

    Estamos pues notificados de la decisión de convertir unas acusaciones en su contra en pretexto para imponer su dictadura bajo el pomposo y falso nombre de “poder del pueblo”.

    Sabemos que Petro es hábil y astuto, que está dispuesto a provocar una sangrienta revolución con tal de salvarse de la acción de la justicia, sabemos que no tiene reatos morales que no respeta líneas rojas.

    Estamos los colombianos conscientes del grave desafío que nos plantea este personaje? Dejaremos que el país se ahogue en un mar de sangre con el que pretende ante todo zafarse de su obligación de responder por los delitos que se le imputan?

    Qué están pensando las instituciones centrales de Colombia?: la Corte Constitucional, la Corte Suprema, el Congreso, la Procuraduría, las Fuerzas Armadas? Van a agachar la cabeza, a acatar un llamado a la violencia revolucionaria, a la insurrección? Nos vamos a dejar chantajear por las amenazas de un iluminado?

    Petro, la oligarquía y el golpe

    En su anémica y repetitiva retórica, el presidente Petro echa mano de la palabra Oligarquía para referirse a quienes, según su oráculo: “Se han organizado para dar el golpe de estado..."

    Veamos lo que dice la Real Academia de la Lengua sobre la socorrida oligarquía: "Forma de gobierno en la cual el poder político es ejercido por un grupo minoritario. Grupo reducido de personas que tiene poder e influencia en un determinado sector social, económico y político."

    En concordancia, Petro está en la obligación de explicar quiénes son esas pocas personas que integran ese pequeño grupo que lo quiere derrocar.

    No lo hará porque él usa ese término en sentido  abstracto y con fines desviacionistas, para evitar dar explicaciones que le pueden causar malos momentos, romper con aliados y victimizarse.

    Por ejemplo, tendría que decirles a los colombianos si  Juan Manuel Santos, Ernesto Samper, Juan Fernando Cristo, Álvaro Leyva, varios ministros y exministros de su gabinete, si los expresidentes de Senado, Náme y Cámara, Calle, si los dueños del Clan Torres y otros poderosos empresarios, y hasta mafiosos y jefes paramilitares que hoy están de su lado, hacen parte de esa oligarquía.

    ¿Nos dirá que ellos no son parte de esa odiosa oligarquía? o ¿que ellos son buenos oligarcas? Estoy seguro de que no los reconocerá y que seguirá metiendo miedo para amenazar que en su defensa, el "pueblo", otra noción de la que se ha adueñado como si fuese un objeto, saldrá a evitarlo: "Del pueblo que me eligió dependerá que el designio oligárquico se vuelva realidad o los derrotemos de nuevo. Esta no será una votación parlamentaria de nuestros enemigos para sacarnos. Esto será una lucha popular”

    Petro no deja de ser un desatinado imitador de Jorge Eliécer Gaitán, quien en versión del historiador norteamericano Herbert Braun en su libro Mataron a Gaitán, lo devela como un político actor, que se miraba en el espejo para ensayar y pulir sus actos públicos, que buscaba siempre "mostrarse lo más feo posible" y preparaba de antemano las cadencias de sus discursos y que fue el que usó, de manera impactante, la figura retórica de la oligarquía opresora del "pueblo".  Amenazante, Gaitán llegó a decir algo así como, si me persiguen defendedme, seguidme, si me matan vengadme, y ante pregunta de por qué caminaba tranquilo sin guardaespaldas, circunstancia que podía facilitar que atentaran contra su vida decía no creer que se atrevieran porque de hacerlo no quedaría piedra sobre piedra.

    Pienso que Petro quiere meternos mucho miedo al evocar el trágico ensayo insurreccional del 2021, que en la Colombia actual, el único responsable de su derrocamiento sería él mismo. Pero, él necesita y desea pasar a la historia como víctima de la oligarquía.

    Petro tiene temor de ser enjuiciado por su juez natural y constitucional, el Congreso de la República. Amenaza con rebelarse y convocar a "una lucha popular" que todos sabemos conduce a lo mismo que su camarada Maduro le anunció a los venezolanos, a un baño de sangre. Ambos coinciden en desconocer procedimientos legítimos de la democracia. Esto quiere decir, ni más ni menos, que Petro nos notifica que el delito cometido en su campaña (la violación de topes que tiene por consecuencia su enjuiciamiento por indignidad), está por encima de lo que dispone la Constitución en su artículo 109.

    El bochinche, la asonada, el secuestro de policías y soldados por las "comunidades" para inutilizar la autoridad y la Ley.

    Estamos advertidos, quien amenaza y quiere un golpe de estado insurreccional es Petro, nadie más.

    Darío Acevedo Carmona, 15 de septiembre de 2024

  • Brillante triunfo judicial del historiador Darío Acevedo Carmona

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    A continuación reproduzco el escrito del periodista e historiador Eduardo Mackenzie sobre el significado del fallo de la PGN y anexo el archivo que contiene la decisión de la Procuraduría en el cual se sustenta la inexistencia de méritos para sancionarme por cuatro supuestas infracciones disciplinarias que en mi contra fueron interpuestas por cuatro congresistas: Iván Cepeda Castro, Feliciano Valencia, Antonio Sanguino y María José Pizarro en 2019, con las cuales pretendieron hacerme renunciar a  la dirección del Centro Nacional de Memoria Histórica. El sistemático e intenso hostigamiento al que fui sometido durante el ejercicio del cargo por parte de ellos y sus seguidores en diversos espacios judiciales, institucionales y entre organizaciones de víctimas, causando grave daño a mi reputación y profesionalismo, fracasó en razón, precisamente, por carecer de soporte fáctico y por haberse basado en infundios que demostraron el espíritu macartizador y censurador de mi forma de pensar contraria a la de ellos. Menos mal queda demostrado que de lo que se trataba era de una persecusión ideológica.

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  • Juicio por Indignidad no es golpe

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    Es el presidente Petro quien, en su afán de nunca responder o explicar los escándalos provocados por sus familiares, conmilitones y aliados, escudándose en su vaporosa ideología y remitiendo todas las culpas al pasado, ha instalado en el ambiente político el fantasma de un golpe de estado detrás del cual estarían la oligarquía, los poderosos, los medios, los políticos tradicionales, los en verdad corruptos, etc., etc.

    Y prevalido de ese artificio propagandístico se dirige a las comunidades diciéndoles que deben estar alerta para enfrentar ese “golpe” y amenazando a sus supuestos organizadores con el “ni se atrevan”, “que no se les ocurra” porque entonces, sugiere, el pueblo que considera de su propiedad, “mi pueblo”, se lanzará a las calles como en ocasiones anteriores, para evitarlo.

    De esa burda y malintencionada manera, Petro, a la vez que evade su responsabilidad en los hechos de dominio público notifica a los colombianos que él es un inamovible e inimputable, Es decir, que está por encima de la ley.

    Los hechos de amplio dominio público van desde las declaraciones de ingreso y manejo de altas sumas de dinero de origen dudoso que ingresaron a su campaña como a los bolsillos de su hijo Nicolás, hasta el relativo al miserable engaño y robo de recursos destinados a la sedienta población guajira.

    En el curso de los hechos, un abogado experto en denunciar a quienes violan las normas electorales y a quienes ocupan con indignidad cargos de elección popular, el Doctor José Miguel Abuchaibe, guajiro él, ajeno a la actividad proselitista, fue el que interpuso en mayo del 2023 una demanda por INDIGNIDAD contra la campaña presidencial de Gustavo Petro y Francia Márquez. Lo hizo después de examinar las cuentas presentadas por el gerente de esta, el actual presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, y descubrir que se había sobrepasado los topes de gastos contemplados en la ley electoral. La suma descubierta hasta ese momento no era muy considerable, pero, era suficiente para justificar el inicio de una investigación por parte de la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes.

    El sr Roa, corrió a revisar y a hacer ajustes al informe de gastos, pretendiendo desactivar la denuncia. Sin embargo, en este año transcurrido varias cosas que es pertinente mencionar, ocurrieron. Lo primero es que, en la susodicha Comisión de Acusaciones, el presidente Petro cuenta con una aplastante mayoría de congresistas que se dedicaron a traspapela y a dilatar la investigación, violando el debido proceso.

    En segundo lugar, varias nuevas irregularidades salieron a flote: aportes  de sindicato de maestros, Fecode, de la USO y pagos a centenares de testigos electorales no declarados, y el más reciente del avión enredado en temas de narcotráfico puesto al servicio de a campaña Petro Presidente y a las de algunos congresistas del Pacto Histórico. También, la intervención del Consejo Nacional Electoral que está ad-portas de presentar un documento de acusación contra la campaña por superación de los topes. La denuncia tomó, entonces, mayor validez a los ojos de la opinión pública.

    Pero, lo que le ha dado celeridad al trámite investigativo en la Comisión de Acusaciones, fue la denuncia interpuesta por el Dr Abuchaibe ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, por violación del debido proceso, que se hizo sentir en Corte Suprema de Justicia. Este órgano judicial, encargado de procesar a los miembros del Congreso, inició proceso contra los integrantes de dicha Comisión por prevaricato y obstrucción del debido proceso. Las marchas  masivas de gentes de todas las clases y condiciones en todo el país, a su vez, han dejado sentir su peso.

    La consecuencia es que la Comisión de Acusaciones avanza por estos días en lo que es su deber, llamar a testigos, revisar cuentas, recibir el informe del Consejo Nacional Electoral y preparar el informe, no su juicio, a la Cámara de Representantes en pleno que habrá de tomar una decisión.

    El juicio, cabe aclarar, no es de carácter penal, sino que es un juicio por indignidad, por violación del artículo 109 de la Constitución que, de resultar condenatorio obligaría a la renuncia del primer mandatario. Siendo así las cosas, lo que se insinúa contra el presidente como un hecho indetenible no es un golpe blando, mucho menos, duro, sino un procedimiento legal contemplado en la Carta de Derechos del país.

    He aquí el contenido del artículo 109 modificado por el artículo 3 del Acto Legislativo 1 de 2003, que además nos da la sensación certera de que nadie, absolutamente nadie, en una democracia, puede considerarse por encima de la Ley: “…la violación de los topes máximos de financiación de las campañas, debidamente comprobada, será sancionada con la pérdida de investidura o del cargo…”

    Darío Acevedo Carmona, 8 de mayo de 2024

  • Petro imita a Chávez, constitución en peligro inminente y Dìa del trabajo distorsionado

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    Petro con su apelación demagógica al "pueblo" pretende abolir de facto varios artículos de nuestra Constitución 109 relativo a violación de topes de campaña, 374 a 379 sobre requisitos, y formalidades para reformar la constitución. Petro se autonombra intérprete de ese pueblo que va a las plazas para hacer añicos la constitución vigente. ¿Estará ensayando, como en 2021, un golpe de estado apoyado por lo que él llama "un proceso constituyente popular" que según él, está por encima de la Carta que nos rige.

    La irresponsable, aventurera, revolucionaria e incitadora intervención de Petro hoy 1° de mayo, debe ser vista y recibida como la más clara prueba de su intención de mantenerse en el poder más allá de 2026. ¿Necesitan algo más contundente los que aún dudan de la catadura dictatorial de Petro, quienes aún no se deciden o no quieren entender que llegó el momento de sumarse a la lucha contra la imposición del fracasado socialismo bolivariano en Colombia?

    Una marcha o una concentración, por masiva y vocinglera que sea, no podrá absolver los abrumadores hechos de corrupción en que están involucrados el presidente y varios de sus más altos funcionarios. En Colombia, la masa no reemplazará a los tribunales y a los jueces.

    Darío Acevedo C. 1° de mayo de 2024

     

    Día del trabajo distorsionado

    El primero de mayo en Colombia y en la mayor parte del mundo es un día dedicado a los trabajadores, a la clase obrera y al trabajo a través del cual se honra la memoria de las víctimas masacradas durante una huelga en Chicago, USA, en 1886. Es, por tanto, una jornada conmemorativa en la que los asalariados desfilan con sus consignas, sus banderas y sus cánticos.

    En nuestro país se reconoció como día festivo de carácter cívico en el año 1937 por iniciativa del senador, intelectual socialista y liberal Gerardo Molina. Quiero resaltar un hecho inmodificable que da cuenta de la singularidad de dicha fiesta, la misma que es aplicable a cada día-homenaje a muy definidas personas y hechos a los que se les otorga un gran valor o significancia histórica

     Quiero decir, el 1° de mayo es el día del trabajador o del trabajo y no el día de la raza o el de la independencia nacional o el de una batalla. Esas características son inalterables.

    De modo que, la pretensión convertida en hecho por el presidente Petro de hacerse presente en los actos de ese día al lado de los sindicatos es una absoluta intromisión en cuanto el cargo que él representa nada tiene que ver con lo que se evoca y rememora. Significa, ni más ni menos que Petro al alterar con su presencia oportunista con la que busca generar apoyos populares a su fallida y desastrosa gestión, no solo distorsiona la esencia de esa jornada, si no que termina siendo un insulto a sus verdaderos protagonistas.

    Como si fuera poco el daño que ocasiona con su burdo papel de agitador de masas, Petro, el gran neocolonizador de comunidades indígenas a las que ha corrompido con su ideología trasnochada y fracasada, trae, otra vez, a Bogotá, a la guardia indígena que nada tiene que ver con la efeméride de los obreros. De esa manera, es múltiple el daño y el insulto que se encierra al impregnar el festivo en beneficio personal.

    Por ello, merece un aplauso la Confederación General del Trabajo, CGT, por su digna decisión de no marchar con el presidente y no dejar desdibujar un día que es de los trabajadores y solo de ellos.

    Darío Acevedo Carmona, 30 de abril de 2024

  • La retórica de Petro es basura

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    ¿Es posible y necesario que los colombianos tengamos a la mano una caracterización satisfactoria de lo que expresa constantemente, en todo tipo de auditorios y de públicos el presidente Gustavo Petro? Por parte de dirigentes políticos, analistas y columnistas y en redes, en marchas y recintos académicos se han lanzado apreciaciones u opiniones que describen el contenido de su parlamento como demagógico, populista, verborrágico, culebrero, mitómano, indecoroso, diletante, ofensivo, provocador, entre otros calificativos.

    Considero que quienes gozan de un alto o mediano nivel de formación educativa y cultural no están obligados a refutar cada frase pronunciada de manera ligera, sin demostración, sin asidero o inspirada en momentos de ebullición de los jugos gástricos y de los bajos instintos. Por ejemplo, no hay por qué escribir un texto muy elaborado para refutar a quien dice que el mundo esta gobernado por dos tribus de extraterrestres, o a quien, como en el caso de Petro, preso de su rabia con las marchas del 21A sale a descalificarlas asociándolas con el paramilitarismo, el narcotráfico, la corrupción, la violación de los derechos humanos, etc. 

    Sin duda, es necesaria la crítica elaborada ante tantas arbitrariedades y estupideces justificadas con pobre retórica. Y a fe que quienes lo han hecho, han demostrado la incoherencia, la falta de seriedad, el deseo de enredar, de distraer, el ánimo de pelea, la insensatez, la irresponsabilidad, la grosería que, de forma sistemática, exhibe el presidente Petro en todo tipo de intervenciones.

    Petro echa discursos contra los hidrocarburos, cual profeta advierte el fin del mundo, posa de científico, de líder mundial contra el cambio climático, de profesor que con lápiz en mano educa a su auditorio, de economista, de filósofo, de historiador que destruye de un plumazo nuestro relato fundacional.

    No es improcedente demostrar la falsedad e impertinencia de sus teorías y decires, para hacer ver las devastadoras consecuencias de sus locos y extraviados empeños.

    Opino que todo lo que sale de su boca está impregnado de un vacío de sustento, de ligereza y de espontaneidad que encubre su altísimo grado de ignorancia, y así mismo, de irresponsabilidad cuando desliza el insulto y la mentira en el debate político.

    Petro usa y abusa del lenguaje como cualquier charlatán de cafetín, no alcanza la altura de la retórica de un presidente, se contenta con el empleo de adjetivos y fraseología disociadora para ofender y distraer. Día por día lanza elucubraciones que suscitan escándalo. Cada vez se parece más a Chávez y a Maduro cuyos discursos abundan en diatribas, difamaciones, estrechez de pensamiento y en banalización del lenguaje. A este estilo debemos llamarlo adecuadamente: retórica basura, no sirve para nada bueno, estorba, es desagradable y puede ser dañina para la salud.

    Darío Acevedo Carmona, 27 de abril de 2024

  • No subestimar a Petro

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    Casos se han visto en la historia y en el presente, de gobernantes sobre los que amplios sectores tenían una imagen de menosprecio, incapacidad y eran objeto de burlas que, sin saberse cómo, alcanzaron un poder inmenso e incontrolable desde el que hicieron gravísimo daño a sus países y a la humanidad.

    En el siglo XX, para no ir más lejos, hay varios ejemplos patéticos de ese tipo de personas a las que en principio no se les daba mayor credibilidad para ejercer poderes y dirigir multitudes. En este breve escrito me referiré a algunos casos en los que hubo una manifiesta subestimación del peligro que ellos representaban.

    En Alemania, por ejemplo, luego de la república de Weimar de los años veinte del siglo pasado, venida a menos por el que significó un humillante tratado (Versalles, Francia) fin de la primera guerra mundial, surgió un personaje risible que predicaba la superioridad de la raza aria y una ideología redentora de la grandeza perdida. Adolfo Hitler, un simple suboficial del ejército prusiano creó el partido nacional socialista (nazi) cuyos miembros se uniformaban, desfilaban a la manera militar, eran agresivos y se guiaban por unas cuantas consignas. Pocos vieron en él y en su partido un peligro. En las elecciones de 1933 ningún partido tradicional alcanzó a formar gobierno (sistema parlamentario). El presidente de entonces, Paul Hindenburg designó canciller a Hitler. Sabemos lo que vino después.

    Otro caso en el que un personaje de baja reputación en su partido, el marxista bolchevique de la Rusia zarista accede al poder por una vía inesperada fue José Stalin. Nombrado secretario general del partido que gobernaba dictatorialmente desde 1917, en un cargo administrativo considerado de menor rango. En el partido, a la muerte de su jefe indiscutido, Vladimir Ilich Ulianov, Lenin, en 1924, se disputaban el poder, dirigentes prestigiosos como León Trotsky, Nicolás Bujarin, Kamenev, Rádek, Sinoviev, etc. La lista de sucesores que hacían parte del politburó era de 19 en total, y Stalin que no era ruso sino georgiano, de origen muy humilde, poco educado, malos modales, asaltante de caminos para la revolución, ocupaba el último lugar. Ese hombre preso en su paranoia se encargó de eliminar a más de 300 miembros del Comité Central en el lapso de 13 años, decapitó el ejército en 1937-38 dejando expuesta a la URSS al ataque de las tropas hitlerianas. Su poder fue tan enorme y violento que se le responsabilizó de la muerte de seis millones de ucranianos por hambre en los años 32 y 33, de miles de adversarios de su entorno y de muchas otras atrocidades. Un don nadie se tornó en arquitecto del nuevo orden mundial de la posguerra de los años 40 y artífice de la derrota del nazismo, junto con Churchill y Roossevelt.

    Hay más casos en el mundo de infravalorados que se tornaron en líderes supremos y que causaron innumerables daños a sus países, cito ejemplos latinoamericanos.

    A mi mente viene la trágica experiencia de Cuba, que, siendo gobernada por el dictador Fulgencio Batista, pasó a manos de un hombre cuya máxima virtud radicó en su espíritu aventurero y en su desbordada lengua. Fidel Castro intentó tomarse el poder en un burdo ataque al cuartel Moncada, fue enjuiciado y condenado, pero, subestimado, recibió la gracia del indulto. Una vez en libertad organizó una guerrilla para derrocar a Batista. Atrajo a la dirigencia liberal y demócrata con un discurso martiano. Su triunfo el 1° de enero de 1959 fue recibido con júbilo, pero, a poco andar dio comienzo a una dictadura socialista que aún subsiste y que llevó a su pueblo a vivir en la miseria, sin libertades y sin democracia hasta el presente, 64 años de oprobio.

    América Latina ha sido territorio fértil para todo tipo de dictaduras y dictadores, fenómeno que ha sido registrado en obras de reputados literatos. Entre quienes fueron subestimados y luego se convirtieron en tiranos exhibiendo una gran capacidad destructiva e impusieron ideas y proyectos económicos fracasados, el campeón es Hugo Chávez Frías quien fue indultado por el presidente Rafael Caldera después de haber sido condenado por su intento de golpe de estado en 1992. Nadie le podrá disputar el pedestal de haber convertido, con ayuda de su sucesor, el inepto, corrupto e ignaro, también subestimado, Nicolás Maduro, el país más rico en petróleo en el mundo en uno de los más pobres de América, donde escasea lo que más abunda.

    Podríamos incluir en esa deshonrosa lista a personajes como Ortega, Correa, los Kirchner, López Obrador, pero, es suficiente con los mencionados para demostrar cómo se han equivocado los pueblos al recibir con aclamaciones, votos y fervor el verbo redentor de esos falsos profetas. Y para que en Colombia se entienda el peligro latente que vivimos bajo el mando de Gustavo Petro, quien se insinúa con claridad, como uno de los más letales demoledores de nuestro estado e institucionalidad y quien llegó donde está, gracias a la ingenuidad de quienes subestimaron su capacidad destructora, su desbocada verborragia, su habilidad para crear cortinas de humo sobre sus fracasos y acusaciones por corrupción. Estamos advertidos, pero aún no condenados, siempre y cuando no lo subestimemos.

    Darío Acevedo Carmona, 17 de diciembre de 2023

    Esta columna reaparecerá en enero de 2024, entretanto feliz Navidad y prosperidad en el Año Nuevo les deseo a mis lectores.